Vivimos en una sociedad capitalista, donde el valor de la persona queda sujeto a su valor productivo. Cuando llega la jubilación, la persona deja de producir y genera muchos gastos para la sociedad. Por ello, una persona jubilada deja de producir beneficios a la sociedad y pasa a generar numerosos gastos.
Por otro lado, la jubilación ocupa un 20% del ciclo vital (porcentaje que aumenta con el paso de los años debido al incremento de la esperanza de vida de la población). Por esta razón, la sociedad va a invertir mayores recursos en un colectivo que, por el incremento en la esperanza de vida, pasa cada vez más años jubilados.
Importancia de la jubilación para la persona: Supone una pérdida del rol profesional, lo cual puede generar sensaciones de inutilidad en la persona al desprenderse de su valor productivo.
Al abandonar la vida laboral el tiempo libre aumenta y se da un reencuentro marital, el tiempo de convivencia aumenta. Deben comenzar a llenar este tiempo en pareja desarrollando su relación y disfrutando de una oportunidad nueva.
Por último, la jubilación se vive de distintas formas según cómo cada persona interprete el concepto de vejez y sus repercusiones. Según cómo lo interpreta la persona, puede generar repercusiones negativas o positivas:
– Negativas: Sentimiento de vacío, improductividad
– Positivas: Obtención de tiempo libre y de ocio, abandono de la alienación laboral
En esta etapa vital se da una Valoración de vida; se realiza un balance de la vida y las experiencias pasadas. Valorar la vida laboral se da de forma paralela a valoración la propia vida. Según cómo se gestione este proceso puede ser un indicador de cómo va a llevar un individuo la jubilación y, con ello, la vejez.
Desde Positivarte para las personas que se encuentren en esta etapa del ciclo vital, ¡os animamos a disfrutar de ella!